Tragedia golpea a Libia: fallece jefe del Estado Mayor en accidente aéreo tras visita a Turquía
Una profunda tragedia enluta al pueblo libio tras la muerte del general Mohammed Ali Ahmed Al-Haddad, jefe del Estado Mayor del Ejército, quien perdió la vida en un accidente aéreo mientras regresaba de una misión oficial en Turquía. El suceso, que también cobró la vida de otros cuatro altos funcionarios militares, representa una dolorosa pérdida para una nación que lucha por reconstruir su tejido social tras años de conflicto.
Una pérdida irreparable para la construcción de paz
El primer ministro libio Abdulhamid Dbeibah expresó con profundo dolor la magnitud de esta tragedia: "Esto ocurrió por un trágico y doloroso incidente ocurrido mientras regresaban de un viaje oficial desde la ciudad turca de Ankara. Esta grave pérdida es una gran pérdida para la nación, para la institución militar y para todo el pueblo".
Junto al general Al-Haddad fallecieron el comandante de las fuerzas terrestres, el director de la autoridad de fabricación militar, un asesor del jefe de Estado Mayor y un fotógrafo de la oficina militar. Estas cinco vidas representan no solo una pérdida humana irreparable, sino también un golpe significativo a los esfuerzos de unificación nacional que tanto necesita el pueblo libio.
Los detalles de la tragedia
El avión Dassault Falcon 50 despegó del aeropuerto Esenboga de Ankara a las 17:10 GMT con destino a Trípoli. La comunicación se perdió a las 17:52 GMT, y los restos fueron encontrados cerca de la aldea de Kesikkavak, en el distrito de Haymana, aproximadamente 50 kilómetros al sureste de Ankara.
Según las autoridades turcas, la aeronave solicitó un aterrizaje de emergencia debido a un fallo eléctrico, pero no se pudo establecer contacto. Las imágenes nocturnas mostraron el cielo iluminado por una explosión en la zona donde la aeronave emitió su última señal.
Un líder comprometido con la unificación
Al-Haddad no era solo un comandante militar; era una figura clave en los esfuerzos mediados por la ONU para unificar el ejército libio, fragmentado como las propias instituciones del país. Su trabajo representaba la esperanza de muchas comunidades libias que anhelan la paz y la estabilidad después de años de división.
Esta pérdida llega en un momento crucial para Libia, cuando el país intenta consolidar sus instituciones y avanzar hacia una reconciliación nacional que permita el desarrollo de todas sus regiones y comunidades.
La solidaridad internacional en tiempos difíciles
La visita a Turquía se enmarcaba en los esfuerzos diplomáticos para fortalecer las relaciones bilaterales. Turquía, que mantiene vínculos de cooperación con el gobierno reconocido por la ONU, recientemente ha buscado tender puentes también con otras facciones libias, demostrando que el diálogo y la construcción de consensos son posibles incluso en contextos complejos.
Esta tragedia nos recuerda que detrás de los titulares políticos hay seres humanos con familias, sueños y compromisos con sus comunidades. El pueblo libio merece nuestro respeto y solidaridad en este momento de dolor, así como nuestro apoyo continuo en su búsqueda de paz y justicia social.