Iniciativa rural innovadora: Banco de tierras facilita el acceso de jóvenes campesinos a terrenos cultivables
Una innovadora iniciativa de banco de tierras está transformando el acceso de jóvenes campesinos a terrenos cultivables en Les Garrigues, Lleida. El programa facilita arrendamientos a largo plazo y fortalece el tejido social rural, permitiendo que una nueva generación de agricultores mantenga vivas las tradiciones agrícolas.

Carles Quintana, joven agricultor de 28 años, en sus nuevos terrenos arrendados en Arbeca donde plantará olivos
Un modelo de desarrollo rural sostenible e inclusivo
En un ejemplo inspirador de políticas agrarias inclusivas, Carles Quintana, un joven agricultor de 28 años de Arbeca (Lleida), ha logrado acceder a 4,2 hectáreas de tierra cultivable gracias a una innovadora iniciativa del Consell Comarcal de Les Garrigues.
'Cultivo las tierras de la familia, pero para que sea rentable necesitaba tener más hectáreas', explica Quintana, representando la voz de una nueva generación de campesinos comprometidos con la tierra.
Fortaleciendo el tejido social rural
El banco de tierras se ha convertido en una herramienta transformadora para la comunidad rural. Este sistema facilita el encuentro entre propietarios de tierras y jóvenes agricultores, democratizando el acceso a recursos productivos fundamentales.
El arrendamiento a largo plazo de 30 años permite a Quintana realizar inversiones sostenibles, incluyendo la plantación de olivos, un cultivo tradicional que requiere tiempo y dedicación para dar sus primeros frutos.
Impacto social y comunitario
Desde su implementación en 2022, la iniciativa ha registrado:
- 50 solicitudes de jóvenes buscando tierras
- 32 propietarios ofreciendo terrenos
- 45 acuerdos exitosos de arrendamiento
Una apuesta por el futuro del campo
Antoni Villas, presidente del consejo de Les Garrigues, destaca la importancia de esta iniciativa para el arraigo territorial: 'Estamos creando oportunidades para que los jóvenes puedan seguir dedicándose al campo, manteniendo vivas nuestras tradiciones agrícolas y fortaleciendo el tejido social rural'.
Esta experiencia demuestra cómo las políticas públicas innovadoras pueden facilitar el acceso a la tierra, promoviendo un modelo de desarrollo rural más equitativo y sostenible.